Por Matías Contardi y Emilce Terré
Para la economía argentina, las ventas externas referidas a los productos exportados provenientes de la cadena láctea implican relaciones comerciales por varios cientos de miles de dólares. En los últimos tres años, el valor anual de las exportaciones de toda la cadena en conjunto ha superado los mil millones de dólares en valor FOB.
La leche en polvo, los quesos, la manteca y el suero explican gran proporción del valor FOB del total de la canasta exportadora. Durante el año 2023 se habrían exportado 111.000 toneladas de leche en polvo, por un valor FOB aproximado de USD 400 MM, siendo Brasil el principal destino, pero llegando a países como Argelia, Chile, Camerún, Colombia, Cuba, entre otros.
Otros productos, como la manteca, han tenido diversos destinos, principalmente Europa y el Medio Oriente. La exportación de quesos ha llegado a todo el Mercosur, la Alianza del Pacífico y parte de Asia. Aun así, gran parte de los destinos se mantienen en secreto estadístico.
El valor total por las exportaciones del complejo lácteo habría ascendido a USD 1.181 M , en parte explicado por el menor volumen exportado con relación al año anterior y por menores precios internacionales.
Aun así, Argentina posee un rol destacado en el mercado internacional por lácteos, principalmente sobre las exportaciones globales de leche en polvo. En este sentido Nueva Zelanda encabeza la lista de mayor país exportador, enviando al exterior en promedio más de 1 Mt de leche en polvo al año, seguido por la Unión Europea que exporta una media de 284.000 toneladas y finalmente Argentina que ocupa el tercer puesto.
En lo que refiere al resto de los productos de la cadena láctea, Nueva Zelanda se erige como uno de los principales abastecedores del mercado mundial, siendo que la Unión Europea en su conjunto mantiene un rol preponderante (principalmente dentro de ella, países como Alemania, Países Bajos, Bélgica y Francia).
La producción de leche y productos elaborados durante 2023.
La producción primaria de leche se concentra sobre la región centro del país, con 13 cuencas productivas que durante 2023 contaron con 10.197 tambos activos y una producción diaria promedio de 3.129 litros de leche por día. La cantidad de tambos se incrementó año a año, pero aun así es la más baja a nivel nacional por lo menos desde el 2008 (sin contar 2022).
El grueso de las unidades productivas tiene su epicentro en las provincias de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires con el 84% de la capacidad instalada. En los últimos años se ha reafirmado la tendencia de una paulatina concentración de la producción sobre los tambos con mayor capacidad de producción diaria en detrimento de los más pequeños. En este sentido, según el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) en 2010 aquellos tambos que contaban con una capacidad de producción diaria de más de 10.000 litros de leche por día representaban tan solo el 5% de la producción total; a diciembre del año pasado esa proporción ascendía ya al 29%.
Más allá de que el ritmo medio de producción de leche cruda por día tanto a nivel nacional como en la mayor parte de las cuencas productivas se habría incrementado año a año, según los datos relevados por el Sistema Integrado de Gestión de la Lechería Argentina (SIGLeA), durante el año 2023 la producción de leche se habría deslizado un 2% llegando a contabilizar 11,3 millones de litros y constituyéndose en la más baja en tres años. Aun así, el consumo per cápita de leche habría alcanzado los 193 litros por año siendo el más alto desde el año 2017. El consumo total de leche durante 2023 fue de prácticamente 9.000 millones de litros (+3,6% i.a.), mientras que el ajuste lo llevó la exportación que se redujo en volumen en un 22% año a año.
La producción de productos elaborados de la cadena láctea contó con altos y bajos en materia productiva durante el año pasado. En este sentido, la producción de leche fluida cayó un 1,4% de forma interanual y se posicionó un 13% por debajo de la producción promedio de los últimos diez años, la producción de leche en polvo fue la que más se resintió proporcionalmente de un año a otro recortando más de 52.000 toneladas entre 2022 y 2023. Mientras tanto la elaboración de quesos llegó a las 471.000 toneladas, por encima del año pasado y un 12% más que el promedio.
Dinámica productiva actual
Según el relevamiento de OCLA, a marzo de este año la cantidad de unidades productivas (tambos) llegaría a 9.735 a nivel nacional, marcando una caída interanual del 4,5% con respecto al año pasado. Sumado al recorte en instalaciones, el ritmo de producción diaria promedio para los últimos dos meses relevados es el más lento desde el 2019 llegando a 2.393 litros de leche por tambo por día.
En consecuencia, en lo que va del 2024 la producción acumulada de leche alcanza los 3.726 millones de litros al mes de mayo, un 14% por detrás del año pasado a esta misma altura y el nivel más bajo de la serie, por lo menos desde el 2015. En promedio, las provincias de Santiago del Estero (-25,9%), Córdoba (-15,6%) y Santa Fe (-15%) son aquellas donde mayor atraso relativo se exhibe con respecto a la producción del año pasado, aunque el general de cuencas productivas mostraría números negativos.
Con relación a la producción de elaborados, OCLA estima una caída interanual entre los primeros cuatro meses del año del 15,8%. De los 15 productos lácteos que el observatorio releva, solo dos de ellos no presentan una caída en la producción, siendo que la elaboración de “leche en polvo descremada” (+44% i.a.) y la preparación de “quesos de pasta blanda” (+0,6% i.a.) alcanzarían las 12.000 y 56.000 toneladas respectivamente. El resto de ítems correrían por detrás del acumulado a esta misma altura para el año pasado, siendo que la elaboración de “postres lácteos y flanes” la que más se reciente (-68% i.a.).
A contramano de la dinámica de la producción, según el relevamiento de la Dirección Nacional de Lechería, los precios promedios que habrían recibido los productores por litro de leche se han incrementado desde comienzos de año a una tasa mayor que la evolución general de los precios. Entre las cotizaciones medias de diciembre y las de mayo, el productor habría recibido un 102% más por cada litro de leche (389 pesos por litro en mayo) cuando la evolución del IPC para el mismo período fue del 72%.
Así, dada la dinámica de las cotizaciones locales por soja y maíz la ratio entre litro de leche y kilo de grano ha mejorado considerablemente. Con los datos disponibles a mayo, un litro de leche, en promedio, podía comprar 2,4 Kg de maíz y 1,4 Kg de soja, siendo la mejor relación en varios años. Inclusive, a precios actuales, el poder de compra de un litro de leche es el más elevado desde julio del año 2021 y dentro de los últimos ocho años, solo en cuatro ocasiones, el precio promedio mensual recibido por el productor por litro de leche tuvo un poder de compra mayor al de mayo del 2024.